Mar del Plata posee, por las características de su industria, barros con materia orgánica muy alta y fácilmente biodegradable por las bacterias. Actualmente lo que es residuo, se convierte en abono forestal merced al decidido accionar del Departamento de Ingeniería y Gestión Ambiental de Obras Sanitarias.
Se trabaja desde hace tiempo ya con la incorporación de la metodología del compostaje – que es la reutilización de barros cloacales y poda urbana- en el cual se produce la biodegradación de los mismos mediante la flora bacteriana aerobica autóctona de dichos barros, efectuándose un minucioso seguimiento del proceso mediante el control de temperaturas, humedad y análisis bacteriológicos, entre otros, según lo establecido por las normativas internacionales.
El proceso de tratamiento de compostaje, asegura la estabilización del residuo transformándolo en una enmienda orgánica de calidad para ser utilizada como abono o acondicionador de suelos para uso forestal, o bien como cobertura de relleno sanitario o cavas.